Días de días.
Hay días de días, donde el sol no anuncia el principio y la tarde no llega al morir la mañana; días sin noches oscuras ni luces ficticias, sin lunas alegres ni brillos fugaces. Hay días sin viento que sople, sin frio que llene las quemaduras del sol; y hay días sin dolores leves y continuos, como la vida, cuando se llena de peso y pierde razón. Hay gente que se pierde en los días que pasan, en las noches en vela detrás del Tv. Gente que corre despacio para ser alcanzada, como la cebra que se resigna, o el suicida cobarde que se hace matar. Hay gente que se va muy lejos, gente que alcanza los días que vienen y no los dejan venir, algunos que se tragan la vida sin penas, otros que les duele pasarla despacio, y se angustian siempre por los resultados de su ecuación. Hay años de años, cortos y largos, anchos y tristes, explosivos, implosivos, poéticos, patéticos. Hay años de 12 meses y personas que duran un año, personas que duran un beso, a veces inmortal,...