Eres Libre

 Para lo único que sirve tu libertad, es para tener la libertad de saber que no eres libre de hacer ni deshacer nada, ni siquiera a ti mismo, a tu mente, tus pensamientos, eres libre de hacer lo que te dicen, y eres libre para callar o hablar cuando lo exigen; eres libre de gritar en silencio mientras obedeces, eres completamente libre para no pensar, para sonreír frente a los humos colombianos, frente a nuestros próceres mundanos; eres libre para ver el mundo como lo pasan en un show, para mirar el futbol mientras cometen una matanza por gente como tú. 

Eres libre de encadenarte solo, de seguir malos prospectos, de encarcelarte y acallar la razón que ya tan ahogada esta en tu mente; también, eres libre de leer los periódicos, de mirar al periodista muerto , de no pensar en nada de esto, eres libre de pasar por un parque y sentarte a llorar, pero habrá alguien libre para dañarte y robarte por ello. Eres libre también de golpear, como te han enseñado todos estos años, de armar una guerra por una mujer o un hombre, de odiar, de vengarte de quien te hace daño, como en las novelas mexicanas que ves con tu mamá; eres libre de disparar, y hacerte parte de las millones de personas que hacen lo mismo, eres libre de creerte marginado y perdedor, de quedarte en un suburbio, y volverte un criminal, eres libre de culpar a los demás por eso, y de rezarle a una virgen prostituta que te proteja para matar a alguien.

Eres libre de ir a una iglesia, de arrodillarte ante el padre que a su vez es libre de violar niños, de mentir y tomar vino en su trono de oro y metal, eres libre de amarlo u odiarlo, de criticarlo como todos los demás, de callarte y seguir el camino de la plaza, donde todos piensan y nadie actúa, pero eres libre, mientras no hagas nada contra nadie eres libre, mientras no pienses lo serás, mientras sigas derecho en un atraco hacia tu hermano, mientras sigas dando diezmos para la gasolina de un párroco, o la mitad de tu sueldo al pastor que folla en nombre de dios; eres libre de volverte masón y conspirar contra el mundo, de creer ser altruista y no levantar tu mano hacia un animal hambriento, eres libre de leer un poema y creerte romántico, mientras respiras rencor y culpas a alguien más por no tener amor.

Eres libre de no amar, o de amar demasiado, de no amar a quien pasa a tu lado, al pasto que pisas y el sol que te ilumina, eres libre también de amar los videos y las armas, la ignorancia y sobretodo la violencia; eres libre de creerme idiota, eres libre de parecer basura, también de serlo y sentir que siempre lo serás. Eres libre también de llenarte de vicios, de olvidar cada cosa que te hizo crecer, por lo menos el cuerpo, porque tu pensamiento fue también hace años libre de dejarte a tu merced.

Eres libre, no lo olvides, cree en la moral cristiana, en la pasividad urbana, cree también que todo mejorará, pero cree con todas tus fuerzas, que todo sería mejor si tu no estuvieras acá, piensa por un momento que no eres libre, piensa que no eres libre de ser libre o dejar de serlo, piensa en la utopía que te propongo, piensa en tener la libertad para no ser libre, esa que te dan a cada bocado cuando abres tu boca, piensa que la libertad no es libertinaje, piensa, que cuando dejes de ser libre, entenderás, entenderás por fin eso que nadie entiende, eso que los proscritos escriben lucidos en celdas de rejas y ratas, eso que con tu vida no se puede ver, eso que se llama crecimiento, eso que se llama libertad de pensamiento, eso que te hace no-libre, como algún día quiero ser yo, como algún día, espero que lo seas tú.

Pero nunca tendrás la libertad de hacer lo que hacemos, de vivir lo que vivimos, de pensar lo que pensamos, nunca serás libre de vestir distinto, nunca, serás capaz de mirar diferente, de atacar con las palabras, nunca serás libre de hacer nada, porque eres lo suficientemente libre de ser el mismo prospecto de los otros millones igual que tú. Piensa hoy por fin esa pregunta de niños que nadie sabe responder… ¿Qué es la libertad? ¿Qué libertad tienes? ¿Para que la quieres?”